Receta para la monotonía.

Para preparar esta deliciosa receta necesitaremos los siguientes ingredientes:
          -1/2 litro de madrugones entre semana.
          -Una cucharadita de desayuno efímero.
          -5 piezas de transporte público.
          -Una pizca de caras habituales.
          -3 cucharadas soperas de horarios preestablecidos.
          -Una pizca mínima de tiempo libre.
          -Una pieza entera de lustros dedicados a "quéhaceres" en general.

*Recomiendo limitar el uso de vida social en exceso. En su lugar, sazonar el resultado final con gran cantidad de tedio y hastío.

En primer lugar, cogemos el medio litro de madrugones entre semana y lo vertemos en un bol de gran capacidad. Debemos tener en cuenta que el horario de estos no es relevante para el resultado final de la receta; aunque es preferible que sean madrugones de entre las seis o las siete de la mañana para que la mezcla quede mucho más homogénea. Si deseas darle un toque dulzón a tu receta, te recomiendo que cuando vayas a coger los madrugones a tu supermercado de confianza te asegures de que tengan un aspecto horrible. De estos que te despiertan de malas maneras con ruidos estruendosos e infernales, o en su defecto, con el último hit de Juan Magan. A continuación, echaremos una cucharadita de desayuno efímero a la mezcla. Actualmente la mejor marca conocida es "Magdalena atragantá" ("Muffin ocluído" para los hipsters). Después, cogemos las cinco piezas de transporte público, ya sean Metro, tren o autobús, y lo mezclamos todo debidamente.

En cuanto a las caras habituales, debéis aseguraros que no falten las más clásicas, véase el profesor que te tiene manía, tu jefe, el vecino tocahuevos o el chino de abajo que te devuelve mal el cambio porque te ve cara de tonto y sabe que es más listo que tú. Después de verter las tres cucharadas soperas de horarios preestablecidos (lo común es que sea horarios de mañana  en armonía con los madrugones) llegamos al punto más crítico del proceso: es de suma importancia que el tiempo libre que añadamos a la mezcla sea el mínimo posible. No hay cabida a relajarse viendo la película mierder del Sábado noche de Antena3, o a leer media horita una buena novela (que sé yo, "Cincuenta Sombras de Grey") antes de irte a dormir. Una vez superada esta difícultad, y tras incluir los lustros de cometidos y demás, sólo te faltará mezclarlo todo y dejarlo hacer 40 minutos a fuego lento. Y ahora sí, ¡Enhorabuena! Ya puedes disfrutar de tu mierda de vida inapetente.
Eres un crack.